"Everything will be okay in the end.
If it's not okay, it's not the end"
Pequeño guerrero:
Has empezado el colegio y este un buen momento para hacernos algunas preguntas (En la vida lo importante no son las respuestas, querido, sino las preguntas; desconfía de los que van cargados de manuales con respuestas).
Es mi deber de padrino decirte que no debes ir al colegio... sin preguntarte antes por qué debes ir al colegio.
Bueno, realmente no debes hacer nada en la vida sin preguntarte antes "¿Por qué?". Te aviso que es un peligro, porque las preguntas, cuando son valientes, llevan a otras preguntas que a su vez llevan a otras... y así sucesivamente hasta que nos cuestionamos a nosotros mismos, nuestro origen, nuestro fin. ¿Me sigues? ¿Qué has venido tú a hacer a este planeta? Una pregunta fascinante, sin duda.
Hubo un filosofo francés insoportable (recuérdame que te explique el significado de "redundancia") que se creía muy listo –pero no lo era– e hizo estragos hablando y escribiendo memeces sin pensar; por ejemplo, decía que "somos seres arrojados a la existencia". Ciertamente nadie te ha preguntado si querías existir, nacer o ir al colegio, pero la verdad más radical es que eso es mejor que si no fueras al colegio, o no nacieras o incluso que no existieras. Querido mio: no eres una cáscara de nuez al albur de olas de una tormenta cósmica sin leyes ni causas. Estás en un lugar preparado desde siempre para ti. Y tienes una misión que cumplir. Descubrirla será en sí una gran aventura. Tu aparición estelar en el mundo y en nuestras vidas estaba planeada con cuidado y amor desde el principio. Él, que trabó las ruedas de los carros del faraón; Él, que diseñó tus ojos luminosos, tiene un plan reservado para ti; un plan que hará que cada día de tu vida esté lleno de maravillas mejores que las del cualquier cuento o leyenda.
No será fácil: a pesar de tener unos padres excepcionales, inteligentes y guapos, cometerás errores. La mayoría de las veces serán culpa exclusivamente tuya y vendrán de un mal uso de tu libertad (ser libre implica el riesgo de equivocarse) y eso puede traerte dolor y sufrimiento a ti y a los que te rodeamos. Entonces deberás ser fuerte y rectificar, pedir perdón, arreglar en lo posible el daño causado y empezar de nuevo.
Nunca te quedes tirado en la cuneta si te das cuenta de que te has equivocado. Nunca cometas el error de pensar que un error es irremediable. Recuerda que las mejores historias no hablan de personas infalibles, sino de las que se sobreponen a sus fallos y siguen adelante, una y otra vez, y otra y otra... Hasta el final.
¡Optimismo, pequeño, optimismo! Lo mejor es posible: alarga tu mano y cógelo. ¡Tu vida tiene que ser asombrosa! Tenemos el reto de convertir nuestra existencia en algo merecedor de muchas relecturas; en algo que inspire y emocione a quienes vendrán después. Habrá lágrimas, habrá oscuridad, te dirán que tus victorias han sido fracasos, habrás de romper cadenas de prisiones sobrehumanas, encontrarás amigos leales y desleales, pero verás que la vida está llena de "finales felices" que salpicarán el camino hacia el definitivo final feliz: el último día, en que llegaremos a la meta, de la mano de todas las personas que amamos, con sus cartas de recomendación, con tu misión cumplida... con todas las preguntas respondidas.
Por lo tanto: Audaz y valiente para las preguntas, sagaz y optimista ante las respuestas.
Hazte fan de los finales felices.
Best happens, hijo.